Se abren los mejillones (medio kilo) al vapor con medio vaso de agua o vino blanco, el caldo que sueltan se usará para el arroz, decantándolo para limpiarlo.
En una paellera o sartén grande se hace un sofrito con media cebolla, 2 dientes de ajo y 2 cucharadas de tomate triturado y un pimiento rojo cortado en tiras.
Se añaden las gambas al sofrito si son crudas, si son cocidas se añaden al final, con los mejillones cocidos.
Se añade al sofrito 1 taza de arroz y 2,6 tazas de caldo, no es necesario añadir sal ya que el caldo de los mejillones es muy salado. Para potenciar el sabor se puede añadir una pastilla de caldo de pescado.
Es importante añadir el arroz seco, no lavado, ya que si lo lavamos no absorberá tan bien el caldo, quedando más insípido.
Se añade azafrán y se lleva a fuego muy fuerte 12 minutos y a fuego suave 8 minutos, dejando reposar luego un par de minutos tapado con un trapo, antes de servir.
Fácil y rico.
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